domingo, 1 de abril de 2007


300 RAZONES PARA ESPANTAR UN DEMENTOR

Aún en los momentos más densos de nuestras vidas, cuando se piensa sinceramente en la idea de desaparecer, está alguien o algo que te hace volver a la felicidad, esa escurridiza y maravillosa sensación.

Esta semana fue tal vez una de las peores que he vivido. Muchos tragos amargos, trabajo como si se fuera a acabar el mundo, momentos duros que no esperaba vivir, decepciones de gente que amé en la vida (más exactamente mi ex), mucha lluvia y pocas ganas de disfrutarla.

Pero llegó el sábado y no había muerto, lo cual era definitivamente una ganancia. Además, recibí disculpas de quien más me hirió, respaldo de mis jefes (que aún no supero... sé que no leen esto, pero los amo, en serio), abrazos y ringtones de mis amigos, un buen momento en un balcón con un tipazo, un stand en la Feria del Libro (que se luchó a muerte), una tarde tranquila y llena de risas y buenas ideas con la persona que más quiero (y que no es mi mamá) y finalmente, ir a ver la película 300, que es sin duda de las mejores que he visto... gracias Burbanito por recomendármela hace tanto tiempo, tenías toda la razón, es increíble.

Ahora, un álbum de fotos de esta maravilla fílmica, que definitivamente fue el anti-dementor de hoy.

Frank Miller, el genio del comic que inspiró la película



Del comic a la película. Sencillamente hermoso.


Spartans, tonight we dinne with you!!

La escena del lobo fue de las mejores que vi... ese color y la textura casi me dan un paro cardiaco.


Ni pregunten qué tenía el árbol


Uno de los 300 rechazando las granadas de fabricación casera de los Persas.




Sencillamente espectacular. Es una de las pocas películas que me tuvo sentada y concentrada de principio a fin. Casi no me termino de comer lo que compré y mi compañero de travesía trataba de hablar conmigo sin mucho éxito, la verdad.

Gracias a todos los que me regalaron sus palabras, abrazos y detalles en estos días tan duros: Orte, Marie, Miyu, Burbanito, Richard, Pat, Ma, Monis, Guille, Mari, David, Sebastian, Joshua, Vlad, ustedes son grandes y estoy en sincera deuda por escucharme y darme fuerzas... estas cosas no las olvido.

Ahh y por último, encontré mi patronus y el recuerdo feliz que me lo genera.

Este es mi patronus y el recuerdo que lo genera es tu rostro cuando sólo yo lo veo. Creo que voy a terminar definiendo qué haré contigo por democracia, porque no puede ser que todo el mundo esté de acuerdo en algo menos yo. Francamente no lo veo igual que ellos, pero vox populi, vox dei (jaja, yo sé que soy una cobarde).
JO

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